Riccardo Muti es uno de los directores de orquesta más valorados y apreciados del mundo de la música. Esta semana ha sido galardonado con el Premio Príncipe de Asturias 2011 de las Artes.
Con el fin de ilustrar a mis alumnos sobre la figura de este excepcional músico ejemplo de ética profesional y de calidad humana.
Este afamado director de orquesta que cuenta con más de 30 años de experiencia, tiene 70 años y se mantiene activo y con proyectos. Es por tanto, un ejemplo de vitalidad, ilusión y amor por su trabajo. El Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2011 le ha sido otorgado atendiendo a sus virtudes, vocación investigadora y formación humana, algo a tener en cuenta puesto que los premiados se convierten en figuras de referencia. Muti representa la unión entre la tradición clásica y el respeto a la partitura y la intención de dotar a la orquesta de entendimiento con la partitura y conexión con el compositor, algo realmente difícil puesto que la partitura no refleja al 100 % lo que el compositor quiere.
Riccardo Muti es originario de Mofetta (Apulia; Italia). Actualmente mantiene la tutela de la joven orquesta Cherubini y recientemente ha accedido a tomar las riendas de la Orquesta Filarmónica de Chicago a la par que conserva un estrecha relación con la filarmónica de Viena y se ha atrevido a refundar la Opera de Roma en un momento político complejo debido a la crisis económica y a las restricciones que ésta ópera ha sufrido. Tambien ha rechazado, hecho curioso dirigir la afamada Orquesta Filarmónica de Nueva York.
Es por todos conocido que en presencia del presidente Berlusconi y tras una ovación por parte del público de más de 15 minutos, se dirigió al público y pidió a los gobernantes que no sacrificaran al arte y la cultura. Muti quiere convertir a este teatro en un teatro a la altura del que esperan los romanos.
Este es el vídeo se muestra el cariño y devoción que el público tiene por este director de orquesta.
"Si matamos a la cultura sobre la que está fundada la historia de Italia en verdad será nuestra patria la que se quede bella y perdida", dijo el director en presencia de Berlusconi.
"Si matamos a la cultura sobre la que está fundada la historia de Italia en verdad será nuestra patria la que se quede bella y perdida", dijo el director en presencia de Berlusconi.
Fue director del Teatro de la Scala de Milán desde 1986; sustituyendo al afamado director Claudio Abbado, hasta su dimisión en 2005.
En cuanto a su manera de ver el patrocinio de las artes, Muti aboga por introducir como patrocinadores de los teatros de Ópera a la sociedad civil y a los ciudadanos y que no sólo los gobiernos, estados y empresas privadas patrocinen los teatros. El hecho de involucrar a los ciudadanos responde a una visión de la sociedad más amplia y responsable. El bien cultural de ser defendido por los ciudadanos.
Aunque en algunos medios se le ha tildado de distante sus obras muestran a un hombre culto que sabe mostrarse ante los demás.
Ha acudido a un concierto de piano en la Prisión de Bollate en Lombardía porque un recluso le remitió una carta sobrecogedora solicitándole la posibilidad de hacer música para los presos algo a lo que no se negó puesto que entre sus frases destaca ésta: "la música clásica no está reservada a una elite".
Considera que la música clásica no ha de ser un lujo reservado para los ricos y cultos sino que la música pertenece a todo ser viviente.
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